Ojalá que no puedas

Después de un tiempo de ausencia involuntaria, nuevamente estoy aqui, para seguir compratiendo cosas de la vida. Y entre esas cosas, ayer de tarde encendí la radio y estaba sonando un tema de Cacho Castaña: Ojalá que no puedas. Este cantante y compositor argentino de larga trayectoria, se caracteriza por tener letras que cuentan la realidad de una forma particular.

Este tema ya tiene sus años, pero a pesar de conocerlo, recién ayer entendí realmente lo que su amante le quiere decir con "Ojalá que no puedas". Para aquellos que no conozcan la letra, aquí está:

Le mentí que por ella yo iba a dejar, mi mujer y mis hijos, Le mentí tantas veces que anoche se fue, y al marcharse me dij:

Ojalá que no puedas ni besarla en la boca,

Y al mirarla a los ojos que sospeche que hay otra,

Que la arranca a tu vida lo que ella no puede,

Que le arranca a tu sangre lo que no se atreve.

Ojalá que no puedas destapar la botella,

De tu vino caliente cuando duermas con ella,

Estoy harta del trueque de la hipocresía,

Que despierten sus pieles pensando en la mía.

Ojalá que no puedas hacerle el amor cuando duermas con ella,

Ojalá que no puedas hacerle el amor, ojalá que no puedas,

Ojalá que no puedas hacer que tu piel se agigante de sueños,

Que se muera de ganas, que no tenga consuelo,

Que le sangren las manos si acaricia tu piel o acaricia tu pelo.

Le mentí que por ella yo iba a dejar, mi mujer y mis hijos, Le mentí tantas veces que anoche se fue, y al marcharse me dijo.

Ojalá que no puedas, lo que hacías conmigo,

Cabalgando en mi vientre te quedabas dormido,

Y en tu boca dejaba mi tibio candor,

Y en la mía quedaba, tu loco sudor.

Ojalá, ojala que no puedas, tengo celos de amante,

Porque sé que en tu cama soy lo más importante,

Ella se hace la tonta porque le conviene,

Se alimenta conmigo si no te tiene.

Ojalá que no puedas hacerle el amor cuando duermas con ella,

Ojalá que no puedas hacerle el amor, ojalá que no puedas,

Ojalá que no puedas hacer que tu piel se agigante de sueños,

Que se muera de ganas, que no tenga consuelo,

Que le sangren las manos si acaricia tu piel o acaricia tu pelo.

La amante lo plantó. Se cansó de la espera, de las promesas, de las mentiras. Y en su despedida le desea lo peor a él y a su esposa también. Sabe que él quiere a su esposa, pero la desea a ella, por esas cosas que tienen algunos los hombres, y muchas mujeres también: locuras, pasión irrefrenable, fantasias, a la hora de hacer el amor. Y lo que muchas o muchos no esperan, es enamorarse de su amante. Y ahi comienzan los problemas. Es cuando uno quiere que comiencen a cumplirse las promesas, salir de a dos, mostrase, compartir más tiempo. Y resulta que la oficial pasa a ser la otra, la intrusa, la que no nos deja vivir nuestra felicidad. Son las cosas de la vida. Pero por qué desear mal al otro? Por qué no pensaste primero? Porque simplemente creiste en el otro. Porque uno nunca piensa que te va a suceder hasta que sucede. Y si te sucede, tómalo como es, no reproches, no exijas, no pidas, porque hilo se corta siempre por la parte más fina.